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Estrenamos escaparate de otoño en nuestro shoowrom en Barcelona

Nuevo escaparate en nuestro showroom de Barcelona

Estrenamos otoño. Estrenamos escaparate en el showroom. Un escenario bautizado como ‘Rock and Sophistication · Find your other side’, en honor al contraste entre la actitud de nuestra protagonista, que espera la llegada del otoño de la manera más cañera posible, con este ambiente parisino, romántico y sofisticado.

Ahora que las hojas caen, es momento de hablar del otoño y su magia. Nos situamos en París, frente al viejo portón de un gran palacio. Si abrimos sus puertas, llegamos a un mundo lleno de ilusión. Nuestra protagonista, rebelde por naturaleza, ha salido a la calle -que bien podrían ser los Campos Elíseos- para barrer las hojas. Pero no de cualquier manera: ella tiene la actitud Chanel de los años noventa, en contra de lo que cualquier parisino podría esperar de una mademoiselle. He ahí la magia de una ciudad de interesantes mezclas y contrastes de rock y sofisticación.

La magia del contraste

Partimos de una contraposición en sí misma. Una mezcla del París clásico -algo casi onírico- que forma parte del pasado, con la estética de los 90’, tan de moda actualmente. Sin olvidar la contraposición que supone ver a una mujer barriendo su calle con este estilismo.

Arriba el empolvado blanco

En él también podemos ver el concepto de contraposición. Inspirado en los años 80’, fue una época en la que el maquillaje fue más que bienvenido. En fotografía de moda era muy común empolvarse la cara hasta conseguir este tono blanco-blanco y acercar las manos al rostro para hacer énfasis en este contraste tan grande. Tal y como hace nuestra maniquí.

Escaparate Rock & Sophistication Escaparate Rock & Sophistication

Un escaparate de sensaciones

¿Qué puede sentir una persona que pase por delante del aparador? Paradójicamente, un conjunto de sensaciones contrapuestas. Esta creación puede llevarle a diferentes universos e interpretaciones. Ver a esta mujer, casi como descontextualizada, puede interpretarse desde algo ridículo, onírico, divertido… Pero, a su vez, es tan sumamente estético que hace muy difícil apartar la mirada.

Nuestra mademoiselle te espera en Carrer de Girona, número 8, hasta que las hojas dejen de caer.